CUIDADO CON LOS ENGAÑOS SATÁNICOS
"Mirad que nadie os engañe por medio de filosofías y huecas sutilezas, según las tradiciones de los hombres, conforme a los rudimentos del mundo, y no según Cristo".(Col. 2: 8)" .(Col. 2: 8)
Nuestra salvaguardia
Necesitamos una firme confianza en Dios si deseamos ser guardados del poder de los elementos satánicos. Si nos mantenemos unidos a las enseñanzas de la Palabra, las verdades de esa Palabra serán nuestra salvaguardia y nos mantendrán a salvo de los errores de estos últimos días. Necesitamos la verdad. Necesitamos creer en ella. Sus principios se adaptan a todas las circunstancias de la vida. Preparan el alma para el deber, y la fortalecen para la prueba. Ostentan la marca de su divino Autor. Ejercen una influencia protectora sobre todos los que son puestos en contacto con ellos. (Luc. 17: 26, 27).
Peligro constante
: La terquedad natural del corazón humano resiste la luz de la verdad. La orgullosa estima de su opinión conduce a la independencia de juicio y a la adhesión a las ideas y a las filosofías humanas. Algunos se hallan en constante peligro de abandonar la fe por un deseo de originalidad. Desean hallar alguna verdad nueva y extraña para presentar, tener un nuevo mensaje que dar al pueblo; pero tal deseo es una trampa del enemigo para cautivar la mente y apartarla de la verdad. . . El Señor desearía que los que comprenden las razones de su fe descansen en su confianza en que aquello por lo cual han sido convencidos es la verdad, y que no se vuelvan de la fe por la presentación de sofisterías humanas. . . En estos últimos días necesitamos una fe grande y creciente. Necesitamos ser arraigados en la fe por un conocimiento y una sabiduría que no provengan de ninguna fuente humana, sino que se hallan sólo en las riquezas de la sabiduría de Dios.
Firmes por la fe
Los que han aceptado la verdad del mensaje del tercer ángel se han de mantener firmes por la fe; y ésta los retendrá para que no sean llevados a las supersticiones y las teorías que los separarían entre sí y de Dios. Nuestra recepción de la verdad que tenemos como adventistas del séptimo día no fue una experiencia casual. Se la alcanzó mediante oración ferviente y estudio diligente de la Palabra inspirada. El Señor quiere que andemos y trabajemos en perfecta unidad (Review and Herald, 19 de agosto, 1909
Por: Elena G. White
Elena G. White, "Review and Herald, 19 de agosto, 1909"
- Review and Herald, 19 de agosto, 1909